En Cocotitlán. El mercado municipal en manos de un grupúsculo que no rinde cuentas a nadie.

*Benito Márquez, sedicente administrador, ha sentado sus reales y lo explota de manera indiscriminada.

Por Efraín Morales Moreno.

Autoridades municipales de Cocotitlán, ponen el descubierto la serie de anomalías que impera en el mercado de la demarcación ya que un grupúsculo de personas han hecho del lugar un pingüe negocio del que a nadie se le informa la manera en que se distribuyen los recursos que se genera además de que los locatarios no pagan ningún tipo de impuesto a la hacienda pública municipal por concepto de usufructo comodato ó explotación de los locales comerciales que son propiedad del municipio.

Lo anterior fue declarado por la 9na. regidora Minerva Paulina Barbosa, quien tiene la comisión de comercio, mercados y vía pública ya que al revisar los pagos por licencia de funcionamiento de los negocios de la municipalidad descubre que en el mercado, los negocios operan de manera irregular al amparo del pseudo-lider Benito Márquez quien se dice administrador del mercado, donde ha sentado sus reales y explota de manera indiscriminada sin que a la fecha a ninguna autoridad de la demarcación le rinda cuentas de los recursos que genera el mencionado complejo comercial, así como el destino de éstos.

Según algunos vecinos de la comunidad, se tiene conocimiento de algunas prácticas ilegales dentro del mercado ya que a pesar de que el sub-arrendamiento debería estar prohibido por tratarse de un bien municipal, Ernesto Torres renta un local a Miguel Ortiales como si éste fuera de su propiedad, y este tipo de actividades las solapa el presunto administrador Benito Márquez porque al parecer recibe algún beneficio económico para que deje que se lleve a cabo ésta abusiva práctica.

Por otra parte, fuentes cercanas al mercado comentaron a Jornada Política que el sedicente administrador Benito Márquez, cobra una cuota fija a los locatarios por concepto de sueldo del velador, pero nadie conoce cuanto logra recaudar éste sujeto, y ningún comerciante tiene conocimiento sobre el importe del salario del velador, así como se ignora si cuenta con algún tipo de prestaciones y/o seguridad social ó seguro de vida.