PRI, nervioso en la Z. O.
Las fracturas el interior del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el municipio de Chalco, se han hecho más que evidentes por la eterna lucha por el poder entre los grupos existentes en la demarcación, que buscan estar posicionados o tener el control del partido y del poder, con miras a la elección del año próximo donde se votará por el alcalde de ésta ciudad; posición a la que todos quieren llegar.
Entre la larga lista de suspirantes, que desde luego sea reducido sustancialmente, se observa a gente cercana a cada grupo, con la firme intención de ser ellos y solo ellos, quienes abanderen la causa partidista, pensando que no hay nadie mejor que el que opina, (es decir ellos mismos), como aspirante y eventual candidato natural, que puede ganar esta elección.
Sin embargo, si el partido quiere ganar, debe proponer a un hombre joven, emergido de la ciudadanía, (como un candidato ciudadano, púes), que no tenga un lastre que le impida estar en el ánimo de la gente, carismático, que no traiga “línea directa”, por ser hijo, hermano, sobrino, compadre o incondicional delos mismos de siempre, pero sobre todo, que sea capaz de unir a los grupos y de ganar la voluntad de la oposición, que será el punto determinante para poder alzarse con el triunfo.
A estas alturas de la vida, no basta ser el hijo de un importante político, y heredero de nadie, hay que saber trabajar y conocer la problemática de cada rincón del pueblo que se pretende gobernar, empezando por conocer de sus pueblos y colonias; olvidar de compadrazgos y canonjías, pensar que el ejercicio del servicio público no es una beca eterna que disfrutarán generaciones enteras que nada han hecho por ganar un espacio para sí, se requiere de mucho más que eso para que en ésta etapa de fuertes luchas partidistas, salga un hombre joven, íntegro, sin cola que le pisen, sin apellido que le pese cual loza en la espalda, garante de la unión entre grupos y partidos, para que pueda abanderar al tricolor en su camino al triunfo del 2012.
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